El fuerte chaparrón del sábado pasado parece haberse ensañado con el este tucumano. En la comuna de Delfín Gallo, el viento que precedió a la lluvia derribó a un añoso eucaliptus que cayó sobre la vivienda de una familia, en la avenida principal, lo que destrozó el techo de varias habitaciones, narró el vecino Silvio Escobar.
Escobar contó que varias casas perdieron sus techos por las intensas ráfagas y, de igual modo que en El Timbó Viejo, el granizo también se hizo sentir. "A varias familias se les arruinaron sus pertenencias y recién al día siguiente recibieron ayuda de Defensa Civil. Fue tremendo", contó.
El sábado pasado, alrededor de las 20.30, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) declaró el alerta meteorológico para Tucumán, Corrientes, Chaco, Santiago del Estero, Formosa, Jujuy y Salta. Media hora después la tormenta se desató sobre San Miguel de Tucumán y sus alrededores. El aguacero produjo un fuerte descenso de la temperatura, que había trepado a los 36°, con una sensación térmica superior en el centro de la capital tucumana. LA GACETA ©